Cría de guepardo Schleich
Los guepardos pesan 300 gramos al nacer. Su pelaje tiene ya las típicas manchas negras y su cara, las inconfundibles rayas en forma de lágrima.
Las crías de guepardo son muy indefensas y sólo abren los ojos pasadas dos semanas. Cuando su madre sale a cazar, quedan completamente desprotegidos ante los hambrientos leones e hienas. La única posibilidad es tener un buen camuflaje. Para ello tienen una crin larga y plateada. El pelo de la crin se endereza, como el corte de pelo ″mohicano″ y de lejos parece una hierba. Aproximadamente a los seis meses, las crías de guepardo aprenden a cazar por sí mismas. Tras uno o dos años, las crías ya han aprendido suficiente y pueden abastecerse por sí mismas.