Este material permite desarrollar un pensamiento lógico-matemático al clasificar, agrupar y emparejar elementos a través de colores y/o formas. Para los más pequeños: El cuenco se puede utilizar como tapa, para hacer aparecer y desaparecer las bolas de su interior como el clásico juego de las “cucú”. También favorece conceptos como el de llenar, vaciar o deslizar y deslizar.
Construcción de madera de tonos pastel. Diferentes formas geométricas que hacen posible diferentes construcciones. En este caso se puede construir un fantástico puente.